A veces nos ponemos malit@s o nos hacemos daño y tenemos que ir al hospital, ese lugar enooooormeeeee, con batas de colores andantes y un olor muy peculiar. Vivi se disfrazó de enfermera e insuperable acompañante en la visita de Nacho al hospital tras caerse por un despiste:
Este cuento nos viene bien para contarle a nuestr@s peques que el hospital, a pesar de ser un sitio un tanto extraño y asociado al dolor y la tristeza, proporciona otros elementos más positivos como pueden ser otr@s compañer@s con l@s que jugar, una médica que te dibuja relojes en el brazo, o un enfermero que te habla con dulzura. A partir de 1 año podemos explicar tales cosas:
La pena es que Vivi no nos regalase más minutos y contase el cuento con rapidez....pero su propósito era que Nacho se curase cuanto antes...por eso lo hizo así.
En realidad Vivi nos ha enseñado
que cualquier lugar
pueder ser bueno
para estar,
y más,
si está ella.
Abrazos hospitalarios
para que puedas dormir
un poco mejor.
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